Alegoría de la alegría: CRÓNICA ZIMBABUESA I

Buenas!!!!

Después del trekking por las montañas fronterizas entre Mozambique y Zimbabue decidí tirar millas para el segundo y seguir ruta. Ni siquiera había pensado en él al principio, pero esto de ir sin norte y viajar solo tienes estas cosas. Así que para Zimbabue o Zimbabwe (in inglishpitinglish)

Algo más grande que Alemania, 390.000 km2, capital Harare, unos 14 millones de habitantes, conocido por las Cataratas Victoria y el río Zambezi, el inglés el tsona y el ndebele como lenguas oficiales y que usa como moneda local el dólar estadounidense, tal cual. Aquí sólo existe el dólar y esto da lugar a una característica muy singular de este país: no hay cambio. Sí, sí: NO HAY CAMBIO. Es graciosísimo. Vas al súper y la cuenta son 3,37usd, les das cuatro pavos y en vez de devolverte monedas te dan un papelito o un papel de la caja registradora por 0,63. Si le dices que no vives allí y que no puedes usar ese vale da igual, !no hay cambio! jajajajajajajajajaj Hay gente que hace la compra con todos los papelitos acumulados y los lleva en fajote con goma de pollo. Buenísimo. Vas a un bareto a echar unas birras, pagas con diez pavos y el camaruta en vez de darte el cambio te da un vale de nuevo!! No te queda más remedio que acabar estufándotelo sino quieres perder la guita. Muy, muy curioso.

Existía la propia moneda, el dólar zimbabuense, pero después de unos periodos de inflación increíble adoptaron el dólar. De hecho, uno de los souvenirs de este país es comprar el antiguo dólar local, tengo varios billetes de cientos de millones de dólares, billones de dólares e incluso los hay de trillones de dólares. Para flipar. Me cuenta un local que la cosa era tan loca que para pagar los autobuses la gente llevaba fajos atados para pagar, cuando días antes se pagaba con monedas (me cuenta que incluso a veces llevaba billetes y papel en medio de los billetes para pagar, y que colaba por que tothom feia lo mateix). Impresionante.

En 1980 1usd equivalía a 1,5zwd. Diez años después el zwd seguía siendo muy fuerte. En julio de 2006 el cambio era de 1 por 400.000zwd. La inflación ha llegado a ser del 140.000.000%.

Para los interesados en la política este país ofrece un millón de historias y corruptelas del señor Robert Mugabe. Da para una trilogía bien buena, desde la lucha de guerrillas pasando por la descarada manipulación de eleccciones hasta la expulsión de miles de personas en la denominada "operación sacar la basura" (en la que miles de personas fueron expulsadas de sus casas, sin más). De héroe guerrillero a villano asesino, a saber qué hay de cierto en cada cosa. Desde luego yo no estoy muy interesado en su historia.

Zimbabue también se hizo famosa en los últimos tiempos por la expulsión de los granjeros blancos, donde se produjeron asesinatos y la tensión llegó a niveles altísimos. Conocí a uno de ellos en Chimoio y me contó como tuvo que pirarse de su tierras. Al tipo le tocó pringar, rezumaba racismo por los cuatro costados. Se ve muy claramente que los blancos adinerados no casan con los negros ni pagando (especialmente en sudáfrica), no hace falta ser muy obsevador para darse cuenta. La expulsión de los blancos de las tierras también conllevó una disminución de la producción ya que eran ellos los que tenían el know-how de las granjas y toda la experiencia de muchos años. Los negros nunca habían sido propietarios y desconocían la mecánica de funcionamiento, ya que casi todas eran de los latifundistas blancos... Vamos, que toda esta intríngulis tiene mucha mucha enjundia y da para otra trilogia.

Después de empezar con todo negativo vamos con algo positivo joder: el carácter de los zimbabueses, son súper simpáticos de serie. Me han recordado a países como Nepal, Mongolia, Colombia en los que la mayoría de la gente es muy cordial y muy simpática con el foráneo. Aquí siempre hay alguien que te lanza una sonrisa o te levanta el pulgar o te suelta un how are you friend o cualquier cosa, pero de buenrollo total. Excelente, me han encantado. Incluso a mi llegada a la estación de buses de Harare (con unos alrededores de lo más sórdidos que he podido ver en toda mi vida, !asustan en serio!) unos locales que parecían más recién salidos del talego que cualquier otra cosa me ayudaron a pillar una furgonetilla para que no me clavaran los taxistas de turno.

Eso sólo fue el refrendo de la posterior constatación de su simpatía, y al parecer no es un asunto subjetivo ya que comentándolo con otros viajeros habían llegado a la misma conclusión que el menda. Chapeau!

La vida es muy cara aquí, es más caro que el turrón del 1880. Quiero decir que sí que se puede viajar de mochila pero no con presupuesto de mochilero sudamericano, asiático o africano del norte, esto es otra cosa amigos. Aquí te la meten doblada y a pelo y si quieres también da para que te metan el dedo en el culo. Y para más inri, si viajas solo has palmado. A veces no te queda otra que pillar taxis y entonces ya has hecho el día por que son a precio europeo si no más.

Los albergues tampoco son nada baratos. La mejor opción es viajar con tienda de campaña ya que en casi todos los lugares tienen sitio para acampar a precios mucho más razonables. Descarado que si vuelvo por estos pagos lo haré con tienda de campaña, y no hablo de la forma de los pantalones cuando uno va empalmado. Así que ahí va un consejo para los que tengan pensado venir por aquí... Y ya que estamos de consiglieri, ahí va otro: lo mejor para viajar por aquí, sin género de dudas, es hacerlo en 4 por 4 dieciséis. Así lo hace mucha gente, se pillan un todoterreno y van a su bola. No son mochileros de por sí, es gente que maneja mucha más guita y que no pasa tanto tiempo viajando. Por aquí hay poquito viajero independiente que sólo tire de buses locales (cierto es que estamos en low season). Los otros grupos son la gente que viaja en unos camionacos inmensos y que vienen con las paquetes cerrados de europa o australia y compañía. Estos van como borreguitos todos juntos y haciendo lo que las empresas les han programado, son paquetes cerrados y que rulan por estos países con todo contratado y cerrado de antemano. Es una especie de "aventura asegurada" en la que hay cero contacto con los locales. Es la primera vez que veo este tipo de viaje con estos monstruos de varias y muchas ruedas. Curioso al fin y al cabo.

Harare la capital, es una de estas capitales africanas que tampoco es que tenga mucho más que ofrecer que un poco de fiesta y algo de música en directo. Eso suele ser lo mejor de estos lugares, y también de Harare: disfrutar de la música local y hacer algo de vida urbanita. A la que sales a pegarte unos dancings ya están por ahí la lumis esperando a ver lo que cae. A veces, cierto es, uno cae en la paranoia de que todas son lumis y que no eres más que un dólar andante. Es difícil substraerse a esta sensación y seguro es que en ocasiones la cagas, pero el cerebro funciona así. Por la noches, parece que todas las mujeres que se acercan a extranjeros sean así o acaben siendo así, que también se da el caso. Por supuesto puede que me equivoque y claro está que hay excepciones. Pero de noche todos los gatos, y las gatas, son pardas...

En Harare conocí a un tipo curioso, Jorge, un alicantino que lleva 4 añitos viajando por sudamérica y africa vendiendo pendientes, o aretes como él dice, y haciendo malabares.

Ahora incluso piercings. A la antigua usanza, ya no quedan muchos así. Y cómo no podía ser de otra forma perteneciente a la tribu de los indios gorrones. Resulta que había conseguido un contacto en el albergue, un bóer, que le había sacado el carné de conducir zimbabuense por 20 dólares, todos los carnés incluídos. Después pensaba sacarse el internacional e intentar validarlo en Spain. Si no podía hacerlo en Zimbabue por que se hace con ordenadores igual iba a Zambia por que allí al parecer certifican a mano. Así funcionan las cosas en estos países, con buenos contactos y algo de guita se puede hacer todo lo que quieras (no creo que le resulte tan fácil validar el carné internacional en España, no me cuadra. De todas formas mantengo contacto con él y como le salga bien la jugada voy a montar un chiringuito para sacarle los carnés a los opositores a bombero. En un par de meses me forro, me compro una isla desierta, invito a unos cuántos colegas y no será una isla desierta. Con el pastizal que nos dejamos los bomberos en las putas autoescuelas...)

De la capital para Victoria Falls, desde donde se visitan las cataratas Victoria, valga la redundancia. Éstas se pueden ver desde Zimbabue o desde Zambia, sirven de frontera natural entre los dos países. Es curioso que las cataratas más grandes del mundo son todas fronterizas: Iguazú entre Argentina y Brasil, Niágara entre Canada y USA y éstas. Fíjate tú!

Son unas cataratas que tienen una caída de cien metros, aprox, y un largo de 1.7 km. En esta época del año van a tope de agua y eso tiene un lado positivo y otro negativo: el primero es que hay muchísima agua y cae con una fuerza brutal, el segundo que al caer tanta agua hay siempre una nube que impide la visión en gran parte de la misma.

Hay zonas en las que acabas completamente mojado, como si te hubieras duchado (ni siquiera puedes sacar la cámara). Aún así no son comparables a Iguazú, aquéllas tienen mucho más encanto.

Aquí se puden hacer puenting, rafting etc etc y tenía pensado quizás hacer algo de rafting, o un descenso en bodyboard por el Zambezi pero el río iba tan lleno que lo habían suspendido hasta nuevo aviso. El puenting es brutal, pero también los es los 120 dólares que te clavan. No sé que impresiona más si el salto o cuando te dicen el precio. Pero como esto está lleno de viajeros pastosos no faltan los clientes. Aquí hay varios hoteles five stars de 500 pavos la noche, o plus. Victoria Falls no es Zimbabue, es Victoria Falls.

Encontré muy buena gente en el albergue, entre ellos Sara una valenciana que casualmente había conocido hace unos años a un compañero del curro en Nepal y habían estado rulando juntos... si utilizo el periódico de Pedro Jota para sonarme los mocos; ¿el mundo es un pañuelo? ;) También a Joao, un gran tipo. Portugués que había estado un año currando de veterinario en el norte de Mozambique. Trabajaba por cuenta del Gobierno portugués y estaba en una especie de misión. Al parecer cuando llevaba varios meses allí se enteró que había varios curas sodomitas de niños y escribió una carta exponiendo el tema. Le respondieron que el problema era suyo... Territorio de nadie, territorio comanche, territorio impune. Así que violar niños les sale gratis a esos hijos de puta. Increíble.

También estaba Ron, un judío estadounidense con el que viajé durante varios días compartiendo tienda de campaña. Buena onda. Con este grupito es con los pocos extranjeros que he socializado, estoy bastante "asocial" y muy muy cansado de los viajeros veinteañeros anglosajones. Me hago viejuno. Ahora me cansan...