Aquí te pillo aquí temazo!!!!
Y esta es una auténtica joya, no me canso de escucharla (que no de oírla) desde que la descubrí hace bien poquito. Viajé por el sur de Brasil en
diciembre y desde entonces busco temas de bossa nova y música brasileña y asíN
acabé en “Construcción”. Madre mía del amor hermoso, qué obra maestra. Ya la
primera vez flipé (pensé: joooooooder esto es muuuuuuuy bueno), pero es de esos temas que tienes que
ponerlos una y otra vez porque tiene más matices que el salpicadero de un Boeing 737.
La letra es pura poesía, y
como tal no exenta de crudeza. Data del 1971 en plena dictadura militar en
Brasil. La descripción del tedio humano ante un sistema que deshumaniza y que
provoca el suicidio a un padre de familia; las relaciones entre el trabajo y el
capital o entre el hombre y dinero como diría aquel… Tampoco voy a hacer una exégesis aquí. Ni allí; aunque ahora
mismo voy más a gusto que una cestica de gatos al lado de una estufa.
Está escrita en versos
dodecasílabos que terminan magistralmente cada uno en un palabrO
esdrújulO, aspecto que confiere una sonoridad brutal a cada fin de verso.
Además, y jugando con el lenguaje y yo creo que con algo mucho más profundo,
intercambia esas esdrújulas finales en cada estrofa repetida (la repite tres
veces a tres intensidades musicales diferentes, in crescendo y en tu culo mi
fonendo). Intercambia las palabras pero no cambia absolutamente nada del sentido
que quiere transmitir. Dice exactamente lo mismo en una estrofa o en la otra, y
narra el mismo suicidio del mismo padre de familia brasileño hastiado de la
vida. Brutalaiser.
La canción acaba con tres
estrofas que pertenecen a otro tema: “Dios le pague” y que se añaden a “Construcción”
de una manera tan natural que abruma, dándole un final, si cabe, aún más
dramático dada la intensidad músical que
acompaña.
Total: para mear y no echar gota.
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